Situada entre la Sierra Mágina al sur y el valle del Guadalquivir al norte, la zona de la campiña de Jaén ofrece un vivero natural para el desarrollo del olivo y sus frutos.
Fríos inviernos, con el rigor del abrigo que ofrece la muralla natural de Sierra Mágina a los templados vientos del sur en invierno, y con tórridos veranos característicos del valle del Guadalquivir hacen que el olivo se encuentre en un terruño ideal para su ciclo vital, y tan difícil de hallar en el mundo que hace de estas tierras de Jaén el hábitat natural del olivar y la aceituna picual.
La disposición de los olivos en 7 pagos diferentes nos permiten balancear para apreciar los distintos matices que cada año cambiante influye sobre el aceite final.
En Sierra Mágina: Fuente Alta y Fábrica Vieja en Cambil